Cuando no hay alternativa, solo queda adaptarse. La industria MICE, a raíz de la pandemia generada por el Covid-19, ha debido reducir sus actividades y concentrar toda su ejecución en eventos digitales. Esto implicó, de manera directa, dejar de reservar billetes de avión y tren, hoteles y servicios de catering, lo que puso en riesgo el trabajo de millones.
Sin embargo, surgieron nuevas oportunidades laborales para organizar eventos online en todo lo relacionado con las invitaciones, la conexión a Internet, el audio y video, entre muchos otros. Todo eso, con el tiempo, fue demostrando que la industria MICE no tenía por qué detenerse.
Naturalmente hay muchas personas que desean retomar la presencialidad lo antes posible, pero en verdad hay muchos motivos para creer que, una vez superada la pandemia, la industria MICE organizará eventos híbridos, donde habrá presencialidad, pero también formas de acceso online.
Para todos los presupuestos
Si hay algo que ha demostrado esta migración forzosa hacia lo digital que han tenido los eventos de la industria MICE es que la asistencia a los eventos se ha multiplicado, debido a que personas con bajos presupuestos han podido conectarse a ellos tan solo con un ordenador y conexión a Internet.
Justamente disminuir esa brecha es un reto venidero que traerá la migración hacia lo digital. Viajar, aunque es una experiencia increíble, resulta bastante costoso y por eso muchas personas se quedan sin la posibilidad de asistir a ciertos eventos. Es por eso que al tener ambas modalidades, virtual y presencial, se pueden multiplicar las opciones de asistir.
Afinar detalles
Todos los primeros meses durante la pandemia se pasaron afinando detalles en las transmisiones. Fue complicado para muchos aprender a usar Zoom, no dejar el micrófono abierto, trabajar en línea, entre muchas otras cosas. Ahora, ya viendo la postpandemia de forma clara, toca afinar detalles para hacer una transición hacia la dualidad digital y presencial de la forma más cordial posible.
La industria MICE está en la labor de organizar nuevos eventos y ferias con ambas modalidades. Para eso, tienen que hacer como si fueran dos organizaciones: una para las personas que irán ahí y otra para todos aquellos que se conectarán a las conferencias o charlas vía online. Esta transición presenta muchos retos apasionantes que estamos prontos a ver.
